lunes, abril 24, 2006

Discurso de Alfredo Casero en el último programa

Discurso de Alfredo Casero en el último programa

Me acuerdo cuando yo era chico que aveces me enfermaba. Bueno, como todos. Todos nos enfermábamos cuando éramos chicos, a menos que Superman, Batman y esos giles que no se enfermaron, que se yo. Y que venia una señora que me hacía algo parecido a... (Se da unas palmaditas en el dorso de la mano) y me dejaba la aguja clavada. Tengo que hacerlo de sopetón, como esa señora.
Hoy es el último programa de Cha Cha Cha. Si bien hay algunos que... bueno... lo ignorarán, hay muchos otros para los cuales este programa era importante. Importante porque era el programa con el que se reían. Ami me daría pena que lo levantaran. Incluso me dio pena que se levantara algún programa que yo quería. Nosotros sabemos que hay mucha gente que nos quiere... y mucha gente que... no nos ve. Por eso hicimos una serie de reformas, tratamos de... pero la gente no vino.

Sería mentiroso si le echara la culpa a cuatro o cinco "infradotados, mentecorta que mandan cartas a los anunciantes para...", mentira. Quedaría bárbaro, quedaría como: "¡Mirá! ¡Levantaron el programa porque por la censura, loco...!". No, eh, no es así. No les voy a regalar tan fácilmente a estos señores esa bandera que después ellos enarbolan, los cuatro que son, porque de alguna manera esta gente me hace un gran favor... Son los que nos obligan a revelarnos y los que nos ayudan a encontrar el horizonte... quien es la gente que nos hace sentir mal... A la gente que... cristianamente... perdonamos.
Porque la idea nuestra es, con este programa, construir. Y sabemos que hay mucha gente, a la cual, este programa le hacía bien, una caricia en el alma. Con las guarangadas que aveces decíamos y con esa mitad y mitad, como hablábamos el otro día con Capusotto. A nosotros nos gusta la cosa refiné y también nos gustaba esa cosa graciosa que tiene el meter los dedos en la mayonesa, ¿no?... Para buscar una aceituna o...

Bueno, a todos los que nos siguieron, para los que fue importante este programa, les agradecemos mucho y les mandamos un beso de parte de Fabio, de Capusotto, de la Pipi, de Moshner, de Marín, de Lito, de Céspedes, de la Sznaider y mío.
Otra de las cosas que quería decirles es que es comprensible que no estemos más en la televisión. Ustedes ven... que no hay lugar para nosotros. Este programa no tiene un lugar. Este programa es excesivamente "caro", es excesivamente "poco comercial". Este programa es, como fue al principio... y como termina siendo. Este programa termina siendo como empezó siendo.

Bueno, chau.

Alfredo Casero

1 comentario:

Anónimo dijo...

Una lágrima se desliza desde mis párpados y recorre mi mejilla.
Mefe (recordando lo dicho en el párrafo del final, repito: causalidad, pura causalidad)